Por las redes sociales ha circulado desde hace algún tiempo, sin mayores explicaciones, una imagen que muestra dos logotipos comparados y su asombroso parecido. Uno es el logotipo del partido Voluntad Pupular, de Leopoldo López, una especie de letra V invertida e inclinada, semejante a una flecha que apunta hacia arriba y a la derecha, de color blanco, sobre fondo circular anaranjado. El otro es un símbolo que muy pocas personas conocen. Es el símbolo de la agrupación neonazi internacional Blood & Honour (Sangre y Honor), tendencia radical descendiente de los llamados Skinheads o Cabezas rapadas. Este símbolo tiene tres veces esa misma letra V (que más bien es una flecha o punta), conformando de manera circular una estrella de tres picos que guarda cierto parecido con el famoso símbolo nazi de origen más bien esotérico. Ahora bien, ¿qué relación realmente guardan Leopoldo López y su Voluntad Popular con los cabezas rapadas de Sangre y honor?
Es necesario determinar ciertos
antecedentes. El primero y más importante de todos es la conocida antigua
afiliación de un Leopoldo López adolescente con la secta católica ultraconservadora
Tradición, Familia y Propiedad, escándalo en el que se vio envuelto cuando era
un total desconocido para la sociedad venezolana, a mediados de los años ´80
del siglo pasado. Recordamos a esta secta principalmente por cierto programa
tipo talk show de entonces que invitó
a los jóvenes de la llamada TFP y su dirigencia religiosa a que explicaran su
cometido como grupo. Pero la TFP no era realmente algo nuevo. Esta secta
cristiana nace en 1960 en Brasil, como un brazo activo y “laico” (en el sentido
de no-monástico) del Opus Dei, y en general muy bien respaldado por los sectores
más conservadores del Vaticano (para mayor información, visite en la web: http://es.wikipedia.org/wiki/Tradici%C3%B3n,_Familia_y_Propiedad
), sobre todo por su ideología expresamente contrarrevolucionaria,
anticomunista y pro-capitalista. Su nombre se debe a la intención de oponerse
totalmente a la tesis de Engels sobre El
origen de la familia, la propiedad privada y el Estado, pues para los TFP
los principios y valores de la barbarie que señala Engels en su libro
(fundamental del comunismo) son más bien las bases de la sociedad que ellos
defienden, en donde la conservación de la tradición religiosa, la herencia
familiar de la riqueza acumulada, y la propiedad privada (entendida como
acumulación de riqueza también) como fin último de la realización del hombre en
la sociedad, son lo más importante para la vida, y ello pasa por encima de
cualquier teoría de lucha de clases. Por supuesto que las diferencias teóricas
no eran sino la excusa perfecta para frenar la influencia de la Unión Soviética
en los países occidentales, sobre todo en Latinoamérica. Así pues, entendemos
que la TFP fue sólo una pieza más dentro del ajedrez de la Guerra Fría. (Para
más información sobre la doctrina de la TFP-Venezuela, que se conoció también
como “La Resistencia”, revise estos enlaces: http://www.pliniocorreadeoliveira.info/ES_19861204_ResistenciayTFPdeclaradasinocentes.htm
, y http://www.pliniocorreadeoliveira.info/GestaES_0205Venezuela.htm
)
Con la derrota final del ideal
de comunidad de naciones de la Unión Soviética, en 1991, la TFP entra en una etapa
estacionaria, subterránea, sumamente alejada de lo mediático. Pero ya, desde
los años ’70, algunas facciones del neonazismo europeo y norteamericano, todos
bajo la doctrina de los Cabezas Rapadas, se habían identificado con el ideal de
la TFP, principalmente en Estados Unidos y en Inglaterra. Existieron alianzas
bajo la fachada de movimientos juveniles urbanos que funcionaban como fuerzas
de choque contra otros movimientos juveniles urbanos de influencia afrodescendiente.
A su vez, por vía de los grupos anarquistas, representados principalmente en la
música underground, nacía a finales de esa misma década una fuerte división entre
anarquistas neoliberales de filiación nacional-socialistas neonazi que
utilizaron la moda punk para expresarse (su música, sus revistas, su
vestimenta) y por otro lado los anarquistas libertarios de filiación
estrictamente filosófica antirracista, que modificaron la moda punk y se
comenzaron a alimentar del pensamiento libertario latinoamericano, del cual se
dejaron influenciar principalmente por lo que les era idiomáticamente más
cercano: Jamaica y su filosofía rastafari. En 1980, estos movimientos punk-reaggae
angloparlantes crearon la tendencia internacional R.A.R., (rock anti racista),
mientras los punk-ska angloparlantes también crearon la tendencia R.A.C. (rock
anti comunista) (para mayor información visite el sitio: http://www.nucleosoa.org/Aquelarre/textos/Alboroto/MusicaAlboroto/MusicaSignificadosPoliticos.htm
). Es el mismo año en que la conocida banda de rock inglés Pink Floyd saca el famoso
disco The Wall (El muro), que da pie
a su película homónima en 1982. No se sabe si la coincidencia fue premeditada o
no, pero lo cierto es que The Wall,
por su fuerte satanización del comunismo soviético, se convirtió en un himno
anticomunista para los “rockeros anticomunistas”, y es en su seno que nacen
entonces, herederos de los primeros skinheads,
los hammerskins (cabezas rapadas de
martillo). El nombre de “Cabezas de martillo” se lo colocaron a propósito del
logotipo con que en el filme The Wall
se caricaturiza al gobierno socialista soviético (recordemos el logotipo del
comunismo: la hoz y el martillo) como un dictador que, por un lado enloquece, y
por el otro lado es animado burlescamente como un monstruo cabeza de martillo
que avanza sobre el mundo, dominándolo. En el filme hay un emblema que tiene
dos martillos cruzados, y ese mismo es el logotipo de los hammerskins (consulte también estas páginas: http://www.nuevorden.net/s_06.html
, http://www.hammerskins.net/ , además chequee también http://www.start.umd.edu/start/data_collections/tops/terrorist_organization_profile.asp?id=3483
.
Ahora bien, dentro del
Hammerskin surge un subgrupo, también de alcance internacional, llamado Blood
& Honour, que se diferencia en primera instancia en que abandonan la escena
musical para simplemente ser agitadores con mayor actividad política que los
simples “skins”, incluso algunos reciben apoyo monetario de los partidos de
derecha del mundo. También se sabe de sus tendencias paramilitaristas (por lo
cual tiene código internacional de grupo terrorista) y economicistas (revisar: http://es.wikipedia.org/wiki/Blood_%26_Honour
–y confrontar fechas sospechosamente erróneas del juicio colocadas al final del
artículo con la información siguiente en este texto-), y allí volvemos al
principio. ¿Qué tiene que ver Leopoldo López y su partido Voluntad Popular con
este grupo terrorista o secta cristiana racista? Es menester hablar del caso que
sucedió en España en julio de 2009, cuando los tribunales por primera vez ordenan
desarticular una organización neonazi en ese país. Era la Hammerskin Blood
& Honour capítulo España. El caso fue descubierto por un periodista que
infiltró, encubierto, las filas de este movimiento pro-hitleriano y franquista,
contó todo a la policía y además publicó bajo el seudónimo (para protegerse) de
Antonio Salas, el libro Diario de un skin.
Un topo en el movimiento neonazi español
(consultar: http://profesordeeso.blogspot.com/2009/08/los-tribunales-disuelven-por-primera.html
y las páginas citadas por esta fuente de fecha inalterable por tratarse de un blog).
Ahora bien, digo que la fecha en Wikipedia es sospechosamente errónea porque
2009 es el mismo año en que Leopoldo López funda aquí en Venezuela el Movimiento
Voluntad Popular, convertido en partido político al año siguiente. El suceso de
España es del mes de julio, la fundación del MVP es de diciembre de 2009. Pero
cabe destacar que mucho antes, ese mismo año, en febrero se sospecha que
Leopoldo López es uno de los autores intelectuales del ataque a la Sinagoga de
Caracas (ver: http://www.aporrea.org/oposicion/a71548.html
) hecho profundamente neonazi, y conveniente para reforzar el discurso
antichavista internacional.
Famosa foto de 2002, cuando participó en las acciones vandálicas del golpe de estado contra Chávez el 11 de abril |
El año 2009 es también el de nacimiento
de su hija, en septiembre, por lo cual Leopoldo López no figura mucho en los
medios por esos días, salvo precisamente para mostrar a su hija por Twitter.
Este “bajo perfil” es así hasta, precisamente, diciembre, cuando funda el MVP.
Llama la atención pues, que justo pocos meses después de que es desmantelada
esta agrupación fanática racista en España, López, de quien conocemos su filiación
con el franquismo español, funde aquí un movimiento que toma como logotipo una
de las puntas de la estrella de los Hammerskin Blood & Honour. Más
recientemente vimos como Voluntad Popular, convertido en partido político desde
2010, fue uno de los que apoyó la candidatura de Henrique Capriles Radonksy
tanto para Presidente como para Gobernador, no sin ciertas diferencias más o
menos ventiladas entre las fuerzas opositoras venezolanas. ¿Será esta la “agenda
oculta” o el “plan propio” de Leopoldo López al cual algunos de los mismos
dirigentes de la oposición se han referido? Todo parece indicar que Leopoldo
López sigue aún con las ideas contrarrevolucionarias, extremoderechistas y
ultraconservadoras que tiene desde la TFP, pasado luego por una ideología Hammerskin
racista y nacional-socialista muy emparentada con la TFP, hasta llegar a las
ideas de dominación política y económica de Blood & Honour. Esto explicaría
las razones por las cuales sectores de ultraderecha del este de Caracas,
territorio dominado ideológicamente por estos llamados Chacao Boys (en alusión
a los economistas neoliberales “Chicago Boys”) han pregonado en algunas
ocasiones ideas hitlerianas. Igualmente, hemos visto últimamente el
resurgimiento de movimientos neonazis en Europa, lo cual tiene una estrecha
relación con el pasado de la Juventud Hitleriana de Joseph Ratzinger “Benedicto
XVI” (lea: http://www.taringa.net/posts/info/1957010/Ratzinger_-un-papa-aleman-_y-nazi_.html
) y la cercanía del Vaticano con estos grupos ultraconservadores.
Seguramente sus partidarios no conocen el origen del logotipo |
Aún faltan muchas piezas por
armar, sin duda, pero es obvio que el rol de Leopoldo López en la política
venezolana dista mucho de ser claro y sincero, sobre todo al evidenciar el “asombroso
parecido” entre los dos logotipos que dan pie a esta breve investigación, que a su vez debería dar pie a una más profunda.