Tomado de AQUÍ |
1.- El
simplificador de oficio que tiene forma de boca alargada y se da alardes de
sabiondo de la comarca. El que se hace eco de los rumores, el mismo que
encuentras en las busetas, en las colas, en los semáforos, en las aulas del
liceo, universidades, escuelas, iglesias, en la esquina, en el bar, en el juego
de dominó y en el perro calientero, que a pesar de su minoritaria cantidad, es
capaz de generar un clima de intranquilidad y pesimismo.
2.- Los
pelabolas que revenden a los pelabolas y se han vuelto los dráculas del barrio,
queriendo chuparle la sangre a todo el mundo. Los guiseros, raspacupos, los que
ven televisión todo el día y los de el espacio sideral que les pertenecen a las
drogas.
3.- Los
que se niegan a dar clases porque no les alcanza el sueldo. Pero que ignoran
por completo el de María la heladera de la escuela que tiene a su hijo
estudiando y con los zapatitos rotos.
4.- Los
corruptos y chulos de allá y de acá que se burlan de la gente, acaparando,
desviando y contrabandeando productos subsidiados por el Estado.
5.- El
guardia el policía y el militar que se prestan para el matraqueo.
6.- Los
que alquilan y revenden el apartamento, o la casita que le dio el Estado como
forma de inclusión social y de igualdad humana para hacer de todos todo. Pero
que hacen de esto, nada.
7.- Los
que pretenden vivir para siempre de los chinos, árabes, colombianos y matasanos.
Los que buscan eternizarse en las colas y se niegan a buscar la comida en la
tierra.
8.- Los
que buscan construir el socialismo científico con el voluntarismo y la
espontaneidad, ignorando el método, leyes y principios del trabajo de dirección
en el socialismo.
9.- Los
acostumbrados al asistencialismo que cierran el paso de las calles porque
tienen 3 horas sin agua, mientras cacerolean y queman cauchos.
10.-
Aquellos que creyeron en el "cambio" y en la manito peluda que les
saco el dedito grosero porque prometió villas y castillos y que ahora se
preocupa más por llevar a Luis Chateing a hacer su programa a la asamblea
nacional y a Nacho el de mi cachorrita mamá! para que diga unas palabras por el
día de la juventud, que cierran los ojos mostrando el dedito grosero a los que
los apoyaron.